Césped

El cultivo del césped consiste en el cultivo de especies gramíneas destinadas a la formación de céspedes para uso ornamental, paisajístico, deportivo o funcional (como control de la erosión). Se utiliza ampliamente en jardines, parques, campos de fútbol, áreas públicas y comerciales.

Las principales especies cultivadas son:

·         Césped esmeralda (Zoysia japonica)

·         Césped São Carlos (Axonopus compressus)

·         Césped bermuda (Cynodon dactylon)

·         Césped batatais (Paspalum notatum)

El cultivo requiere un clima cálido a templado, con buena luminosidad. Las gramíneas prefieren suelos bien drenados, fértiles y con un pH ligeramente ácido (entre 5,5 y 6,5). La implantación se realiza mediante la plantación de plántulas (alfombras, placas, tapones o estolones) y requiere un riego frecuente al principio para garantizar el enraizamiento.

Una vez establecido, el manejo incluye riego, fertilización, control de malas hierbas y cortes periódicos para mantener el vigor y la estética del césped.

La producción comercial de césped se realiza en áreas específicas, con cosecha en forma de tapetes o placas, que se transportan para su instalación en lugares definitivos.